lunes, 4 de junio de 2012

Plan de marketing político en las redes sociales.

Lo que se busca con el plan de marketing es crear una serie dinámicas que se base rigurosamente con el método blended marketing; con este plan lo que se busca es un acercamiento con el público, con la propuesta de hacer dinámicas que los acerquen a las redes sociales y al candidato o partido político; es decir se creará una serie de actividades involucrando a la población, con una estrategia de atracción de nuevos usuarios y llevarlos a las cuentas de redes sociales. Esto no sólo incrementará la presencia de usuarios en las redes sociales si no que dará la posibilidad de que los usuarios se identifiquen plenamente con el candidato ya que este los llevo a la red social.
Las maneras que se pueden ejecutar en base en el blended marketing es dar la opción ejecutar de manera sencilla y fácil de entender a los participantes en base a crear una campaña que inspire confianza.
El blended marketing no habría de tener mayor complicación en su realización ya que se busca un rápido convencimiento a los seguidores potenciales sin ningún obstáculo (como se muestra en la imagen).

La dinámica la complementaremos con las 4 Ps de Manuel Alonso Coto; que consta de Personalizar el mercado o segmentarlo en un target o nicho.
La segunda P de participación del mercado, que es la dinámica ya en ejecución. Par a par que consta de dar confianza al mercado en base a las recomendaciones y la transparencia de la dinámica. Para llegar a la última P de Predicciones y es el hecho de escuchar y aprender del consumidor para poder corregir errores.
El blended marketing tiene que empezar segmentando la población potencial deseada, y así lograr una antropomorfización (que es el hecho de darle cara, cuerpo y necesidades al mercado meta); y con base en eso poder dar un mensaje con mayor impacto y mayor penetración.
Un ejemplo para comprender el blended marketing es con la dinámica de mandar un testimonial audiovisual a una cuenta de Facebook, dando de tema la pregunta ¿que le gustaría que se mejorara en el gobierno actual? (se tiene que tener un ganador y premiar la participación).
La dinámica tiene que ser transparente ya que sólo constará de mandar el video a un correo electrónico y los mejores videos se publicarán en la cuenta; esto conseguirá confianza y la expansión de boca en boca en la población deseada.
Por ultimo establecer que siempre hay cosas que mejorar en la estrategia y que se necesita constantemente de un análisis con los resultados cuantitativos y cualitativos, y así mismo poder verificar si se están consiguiendo los objetivos deseados y poder corregir errores y aumentar virtudes.
Víctor Sabino Hernández Sánchez


Redes sociales y Políticos 2.0 ¿Una crisis de Reputación online sin solución?

Confianza, Seguridad o Transparencia, son valores que en ocasiones están vinculados o afectan directamente al nivel de reputación de los individuos y organizaciones. En política estos términos también son utilizados con frecuencia, aunque el uso de cada uno de ellos es bastante habitual verlos utilizados de forma manipulada para proyectar una imagen que poco se ajusta a la verdadera realidad.

La eclosión de las redes sociales, donde la reputación online también figura entre uno de los grandes activos de las empresas, ha generado que no sólo las marcas recurran a estas herramientas para conectar con sus fans y consumidores. Los políticos no han dudado en subirse al carro de los social media con objetivos similares. Buscando esa audiencia partidista de ideales afines y acaparar la atención de las masas para transmitir sus mensajes y propaganda electoral. Sin embargo, los acontecimientos de los durante los últimos años hemos podido ser testigos, nos han dejado una más que clara evidencia del fracaso de los denominados políticos 2.0 en su aventura en los medios y redes sociales.

La situación económica actual y la gran crisis que atravesamos nos ha servido sino para agravar la percepción negativa de los ciudadanos hacia la clase política. Y evidentemente, esta percepción también se acentúa y se ve reflejada en todo tipo de canales y medios sociales. Comentarios, opiniones, debates, reivindicaciones, denuncias. Existen todo tipo de acciones y manifiestos de los ciudadanos y usuarios de internet, que a través de las redes sociales ponen en evidencia la falta de tales valores, y su descontento provocando con ello un efecto colateral negativo sobre la reputación de los propios políticos.

Aun así, parece que para la gran mayoría de la clase política (por eso de defender las pocas excepciones), la reputación puede concebirse como un aspecto circunstancial. La mala gestión, la corrupción, la demagogia, los abusos e injusticias ante la sociedad más desfavorecida, etc.... ¿Acaso no les importa lo que otros piensan de ellos o cual es la percepción generalizada de la sociedad?

La verdad es que contestar con un rotundo NO, quizás sería una respuesta equivocada o un engaño a nosotros mismos. Pero también el reconocer que esta preocupación puede resultar al igual que importante, oportunista, y sólo en aquellos momentos en los que la participación de la sociedad puede cambiar el rumbo político se torna necesaria. Cuando el valor de los votos y la convocación a las urnas se convierten en su objetivo principal y prioritario, esa percepción puede marcar la diferencia.

Es en este y sólo en este momento cuando la clase política intenta maquillar la realidad, con puestas en escenas propias de una obra teatral, acciones significativas para motivar a los ciudadanos, provocar emociones que abogan a los valores e ideales, promesas de futuro y como no, el inicio de un cambio drástico y sonante en su forma de actuar, de comunicar y de su interés más que oportuno por conversar con quienes durante años ignoraron. Es hora del abordaje a las redes sociales y mostrarse como la salvación a los ciudadanos!

Pensemos en esta reflexión ¿De que sirve mantener una buena reputación si llegada la hora de la verdad a todos resulta tan fácil engañarnos y seducirnos con falsas promesas que nunca llegan a cumplirse?

Imagínese que usted es consumidor de una determinada marca que le promete un producto de calidad, de buen sabor o con una excelente atención al cliente? Usted lo compra pero resulta que no cumple las expectativas. Se siente engañado. ¿Volvería a depositar su confianza en esta marca? ¿Seguiría comprando sus productos? Pues en política es posible que usted se deje manipular y caiga en la trampa aturdido por una agresiva estrategia de marketing continuada que viaje hasta su subconsciente. Capaz de invertir sus pensamientos y decisiones o hacerle cambiar de opinión y hacerle pensar que esta vez será diferente. Son las cosas de la propaganda y sobre todo del Neuromaketing y de la Neurociencia tan valorada para el control de las reacciones y la manipulación de las mentes.

Mientras todo continúe así y sea posible, no existirá ni razón verdadera, ni una preocupación real por mantener una buena reputación intacta. ¿Quién la tiene? sería su excusa y argumentación ante las masas. Además usted es manipulable y así lo harán cuando se acerque la ocasión.

Las redes sociales son simplemente otra herramienta más para nuestra clase política. Otro canal para difundir su propaganda. Y aunque de sobra ha sido demostrado que los políticos españoles fracasan y suspenden en 2.0 y en el uso de las Redes Sociales, y de que sólo las utilizan con fines partidistas y para su autobombo, tampoco es este un problema mayor. Es una autentica crisis de reputación constante casi imposible de controlar pero que al parecer en pocas ocasiones supone o genera un desastre "para sus empresas". Los partidos políticos.

Empresas que como marca propia, también arrastran a miles de fanáticos (Aunque también detractores) capaces de actuar como presumidores y defensores de una filosofía infundada que en ocasiones ni entienden ni conocen realmente. Los de derechas, los de izquierdas, los de arriba y los de abajo. Es indiferente el color.

Tomemos algunos datos recientes. Los resultados de un nuevo estudio de la Universidad de Navarra, teniendo en cuenta los datos del CIS y un a encuesta de elaboración propia, señalan que los científicos son los profesionales que más confianza inspiran a los españoles y los que menos, "los políticos".

"La investigación confirma, por un lado, la baja reputación de políticos, partidos y política en España, cuantificando los niveles de acuerdo o desacuerdo con las afirmaciones que los ciudadanos formulan sobre la política en su vida ordinaria".

"La percepción negativa hacia los políticos se manifiesta, por ejemplo, en que un 66, 7% de los encuestados afirma que estos no se preocupan de lo que piensan los ciudadanos. Asimismo, un 87, 2% cree que les interesa más lo que dice el partido que lo que dicen los propios ciudadanos y al 70% de los entrevistados no les gustaría que sus hijos se dedicaran a la política. Los resultados demuestran que, mayoritariamente, se relaciona a los políticos con la mentira y sus equivalentes, en segundo lugar, con anteponer sus intereses y, en tercero, con la corrupción".

¿Es o no es este un problema de reputación sin solución? ¿Sirven las redes sociales para cambiar realmente esta percepción?

FUENTE: http://www.puromarketing.com/42/13103/sociales-politicos-crisis-reputacion-online-solucion.html

REDES SOCIALES EN CENTRO AMÉRICA

Hoy en día es muy frecuente escuchar, tanto de las personas como de las empresas, el cambio que ha representado en sus vidas las redes sociales. A través de este tipo de medio, es posible encontrar amistades de la infancia, que de otra manera no hubiese sido factible ubicar, asimismo que las personas se involucren y colaboren en causas comunes y afines, y qué decir de las revoluciones que se han originado en distintas partes del mundo utilizando las redes sociales como medio de expresión.
Las empresas están creando perfiles en Facebook y Twitter para acercarse a sus consumidores y conocer “en tiempo real” los comentarios y las interacciones con sus marcas. A nivel mundial existen muchos ejemplos de organizaciones que han “refrescado” su imagen con la “bendición” de sus seguidores en redes sociales, involucrándolos en el proceso, así como ejemplos desafortunados de una desconexión entre la marca y sus fans.
Efectivamente, hoy más que nunca, se escribe en los medios sobre el “fenómeno” de las redes sociales y el cambio en la interacción entre; personas, marcas y empresas. Nuestra región no es la excepción, con un crecimiento en usuarios derivado de la penetración de Internet y de celulares, actualmente Centroamérica se une a esta tendencia y adopta activamente la interacción a través de los medios digitales.
Las redes sociales constituyen una herramienta valiosa para los individuos y las empresas, siempre y cuando se aborden con la relevancia del medio, sus códigos de comunicación y la estrategia adecuada a cada audiencia.
ILifebelt presenta en su estudio esta evolución a nivel regional, que evidencia la creciente necesidad de expresión de las personas a través de los medios digitales. Las redes sociales llegaron para quedarse y han cambiado la forma de relacionarse entre los individuos.